Cogito ergo sum

René Descartes (1596-1650).

La locución latina cogito ergo sum es un planteamiento filosófico de René Descartes, el cual se convirtió en el elemento fundamental del racionalismo occidental. En castellano se traduce frecuentemente como «pienso, por lo tanto existo», siendo más precisa la traducción literal del latín «pienso, por consiguiente soy»[1]​ o «porque pienso, soy» o «soy porque pienso» , ya que normalmente la traducción «pienso, luego existo» se malentiende como «pienso, después existo», siendo que Descartes llega a la conclusión de que pensar es una prueba de la preexistencia del ser (no se puede pensar sin antes existir) y no que la existencia es una consecuencia del pensamiento.

Cogito ergo sum es una traducción del planteamiento original de Descartes en francés: Je pense, donc je suis (yo pienso, entonces soy), encontrado en su famoso Discurso del método (1637). La frase completa en su contexto es:

Mais, aussitôt après, je pris garde que, pendant que je voulais ainsi penser que tout était faux, il fallait nécessairement que moi qui le pensais fusse quelque chose. Et remarquant que cette vérité: je pense, donc je suis, était si ferme et si assurée, que toutes les plus extravagantes suppositions des sceptiques n'étaient pas capables de l'ébranler, je jugeai que je pouvais la recevoir sans scrupule pour le premier principe de la philosophie que je cherchais.
Pero enseguida advertí que mientras de este modo quería pensar que todo era falso, era necesario que yo, quien lo pensaba, fuese algo. Y notando que esta verdad: yo pienso, por lo tanto soy, era tan firme y cierta, que no podían quebrantarla ni las más extravagantes suposiciones de los escépticos, juzgué que podía admitirla, sin escrúpulo, como el primer principio de la filosofía que estaba buscando.

La frase de Descartes expresa uno de los principios filosóficos fundamentales de la filosofía moderna: que mi pensamiento, y por lo tanto mi propia existencia, es indudable, algo absolutamente cierto y a partir de lo cual puedo establecer nuevas certezas.

  1. «Ergo» en latín es una conjunción ilativa, que significa «luego», «por lo tanto», «por ende», «por consiguiente». En español «luego» lo es como quinta acepción, y no como primera, es decir, no como un adverbio de tiempo.

© MMXXIII Rich X Search. We shall prevail. All rights reserved. Rich X Search