El 21 de mayo de 1534 el monarca español creó tres capitulaciones para formalizar las responsabilidades de la conquista del sur del continente sudamericano:
Gobernación de Nueva Toledo, concedida a Diego de Almagro, comprendía doscientas leguas que abarcaban desde el paralelo 14°, límite sur de la gobernación de Nueva Castilla (establecida en la capitulación de Toledo), hasta el paralelo 25º31’31’’ de latitud sur, en las proximidades de lo que hoy es la ciudad chilena de Taltal.[1]